03 mayo 2006

El sentido y los sentidos

Tudanca. Perú... Perú... Perú... - Fran Reus
En lo que ya empieza a parecer especialización, la Fran Reus vuelve a ofrecer al público el trabajo de un pintor nómada: José Luis González (Tudanca, Cantabria, 1944), que a las acuarelas obtenidas sobre el terreno de un Perú viajado y admirado añade una serie de óleos titulada Marazulcito, fruto del recuerdo y de la faena de taller. No son pocas las similitudes gestuales entre Tudanca y José Aranda, que recientemente expuso su obra israelí en la misma sala.
Tudanca ha basculado entre la figuración y la abstracción. En los acrílicos de la serie Del norte, expuesta en 2001 en Sa Quartera de Inca, y ya desde los noventa, el artista basaba su potente lenguaje en la intensidad de los colores. Gabriel Amer señalaba por entonces, acertadamente, la influencia de cierto Rothko y de los expresionistas abstractos. En su figuración también podemos hablar de un expresionismo dulcificado; no cabe duda de que está empapada de subjetividad y de afán de comunicar y, en consonancia con su actitud vital, refleja un universo positivo, en el que reina una luz matinal y vitalista. Aprovecha entonces, de forma muy personal, la virtud de la acuarela de potenciar los efectos de luz. Lo representado suele mostrar contornos indefinidos: no importa la definición de los objetos, sino la recreación de ideas de conjunto y la luminosidad de la atmósfera. Así sucedía con la serie El olor de las higueras, que mostró en la Bennàssar de Pollença en 2002. Tudanca administra sabiamente los distintos grados que pueden darse entre la figuración y la abstracción, sin que esto suponga incoherencia, porque el elemento básico lo constituye la atmósfera a través del color y, a estos efectos, la mayor o menor adecuación de la obra a unos referentes reales es irrelevante.
Y en esta ocasión presenta una serie de apuntes de viaje a la acuarela, de un contenido claramente figurativo al servicio de sensaciones personales, en los que sorprende la vivacidad de los tonos empleados y el optimismo que éstos transmiten. Los óleos incluidos en la exposición, en cambio, retoman la abstracción como vía paralela de introspección basada en la memoria. Todo un halago para los sentidos. Última Hora.

Cerro de San Cristóbal, Lima (2005)

1 comentario:

Anónimo dijo...

has visto la de ana juan en el solleric?, no se si tienes algo escrito porque me he perdido cosas, si no, merece la pena, y el catálogo es bueno y tiene buen precio, besos a todos, Elsa.